Si tienes sospechas o sabes a ciencia cierta que tu hijo puede padecer o padece un Trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad debes leer el siguiente articulo.

¿Qué es el TDAH?

El TDAH es un trastorno neurobiológico, concretamente del neurodesarrollo, es decir, tiene un origen biológico. Este trastorno es uno de los más comunes en la infancia.

El diagnóstico es más frecuente en niños que en niñas aunque en la edad adulta los porcentajes de prevalencia son equivalentes.

Síntomas del TDAH

 El TDAH sigue una trayectoria de desarrollo caracterizada por una marcada heterogeneidad de los síntomas de inatención, impulsividad e hiperactividad. La desatención se manifiesta como dificultad para prestar atención a los detalles, cometer errores por descuido en las tareas escolares o en el trabajo, problemas para persistir en las tareas que requieren mantener la atención, no escuchar lo que se le dice, no acabar las tareas y distraerse fácilmente por estímulos externos o internos. La hiperactividad se caracteriza por una actividad y movimiento exagerados, inquietud, incapacidad para permanecer sentado en situaciones en las que es necesario hacerlo, verborrea y dificultad para jugar tranquilamente. La impulsividad se expresa, a menudo, como dificultades para guardar turno, responder antes de oír completamente las preguntas o instrucciones, falta de paciencia e interrupción frecuente de los demás.

Subtipos del TDAH

 

Se diferencian tres tipos de TDAH: ­

  • Combinado (TDAH­C): presencia de síntomas de desatención e hiperactividad/impulsividad ­
  • Con predominio del déficit de atención (TDAH­DA): presencia de síntomas de desatención, pero no de hiperactividad­/impulsividad
  •  Con predominio hiperactivo/­impulsivo (TDAH­HI):predominan los síntomas de hiperactividad e impulsividad, pero no los de desatención

Causas del TDAH

Los estudios de familias de niños gemelos y adoptados informan de una alta tasa de heredabilidad para este trastorno que se sitúa entre el 75% y el 80%. Así también, se ha relacionado con la combinación de varios genes (poligénico). Esto no implica un origen exclusivamente genético sino que apela, también, a las interacciones genes – medio ambiente. Como factores neurobiológicos destacan cambios en los neurotransmisores catecolaminérgicos (especialmente la dopamina y la noradrenalina) y alteraciones de los circuitos fronto­estriados cerebrales que sustentan las funciones ejecutivas y los centros de coordinación motora que, probablemente, están relacionadas con los síntomas del TDAH .Como factores medioambientales destacan los factores negativos perinatales y socioeconómicos. Se descartan los estilos educativos inadecuados como causa del TDAH, nunca es fruto de causas educativas. Por lo tanto, el origen del TDAH es predominante biológico aunque el ambiente tiene gran relevancia como variable moduladora sobre el resultado, afectando a: ­

– La severidad de los síntomas ­

– La intensidad con la que expresan los síntomas ­

– La gravedad del TDAH ­

– La presencia de problemas asociados: fracaso escolar, trastornos del aprendizaje, negativismo…


 

DIFERENTES PROBLEMAS O DIFICULTADES EN DIFERENTES ÁREAS

 

 COGNITIVOS

 Déficits en algunas capacidades cognitivas : ­

– Alteración de la atención sostenida (concentración durante largos periodos de tiempo).

-­ Alteración en atención selectiva (aptitud de concentrarse en una tarea específica y suprimir los estímulos irrelevantes distractores).

– Alteración en atención dividida (realizar dos tareas simultáneamente).

– Alteración en la memoria de trabajo (capacidad para retener temporalmente en la memoria una cantidad determinada de información mientras se trabaja o se opera con ella). Esto puede provocar desatención, hiperactividad, impulsividad y problemas sociales.

– Control inhibitorio deficitario (capacidad de resistir el impulso de iniciar un comportamiento apetecible, así como la capacidad de no realizar conductas automáticas, interiorizadas o habituales). Los niños con déficits en este aspecto, pueden tocar, hablar sin respetar su turno, decir cosas sin pensar primero o  empezar una tarea antes de escuchar las instrucciones primero. Este es considerado el problema nuclear del TDAH, junto a las dificultades atencionales.

– Algunos niños pueden mostrar dificultad en la flexibilidad cognitiva y conductual, es decir, en la capacidad de cambiar la propia conducta o manera de pensar a partir del feedback del ambiente. Los niños con déficits en estos aspectos, pueden cometer siempre los mismos errores o mostrar dificultad para adaptarse socialmente o frente a las demandas del entorno.

– Así también, algunos niños pueden mostrar dificultades de organización y planificación. Estos niños pueden ser muy desordenados tanto en las tareas escolares como en su día a día.

– Deficiente autorregulación/autocontrol de las emociones.

– Déficits en el procesamiento de información temporal e inadecuada estimación y manejo del tiempo.

– Dificultades de aprendizaje (lectura, escritura, ortografía y matemáticas) y de rendimiento académico

– Menor sensibilidad a los errores.

 – Dificultad en el establecimiento y selección de metas.

– Pocos hábitos de estudio: dificultades para iniciar y acabar las tareas, dificultades en el desarrollo de la actividad y en las transiciones y cambios de las mismas, dificultades en los trabajos en grupo y en la adquisición de hábitos personales de estudio

Todas estas dificultades se resumen en un retraso de aproximadamente 3 años en la madurez de las funciones ejecutivas o un pobre control cognitivo de la conducta. Pudiendo variar notablemente su comportamiento según las características del contexto y de la tarea.

 LENGUAJE

– Retraso en el inicio del lenguaje

– Dificultades en el habla

– Discurso excesivo(hablar mucho)

– Reducida capacidad para organizar y expresar las ideas

– Déficits en solución de problemas verbales

– Coexistencia de problemas con el procesamiento auditivo

– Retraso en la internalización del lenguaje

– Baja internalización del lenguaje, como guía del comportamiento. Todas las personas utilizamos el “hablarnos con nosotros mismos” para guiar nuestra conducta e interiorizar normas. Los niños con TDAH olvidan cosas cotidianas y cambian a menudo de actividad.

– Historias poco cohesionadas, error al recordar o narran una historia coherente.

– Tono de voz elevado

– Dificultad para guardar el turno de palabra, por lo que pueden interrumpir conversaciones.

DESARROLLO MOTOR

– Signos neurológicos menores (lentitud o pobre coordinación motora y movimientos en espejo)

– Dificultad en la ejecución de secuencias motoras complejas

– Coexistencia con el trastorno de coordinación del desarrollo

– Disgrafestesia(dificultades para identificar figuras dibujadas sobre la piel)

FUNCIONAMIENTO EMOCIONAL

– Déficits en la identificación y regulación de las propias emociones tanto de emociones positivas como negativas

– Dificultades para tolerar las frustraciones

– Dificultades selectivas para el reconocimiento de expresiones emocionales faciales

– Dificultad para darse cuenta de las consecuencias de sus actos

– Dificultad para rechazar recompensas inmediatas o retrasar su consecución

– Falta de autocontrol conductual y emocional(explosividad)

– Dificultades para persistir en actividades aburridas y/o que requieren mucho esfuerzo

– Baja autoestima

FUNCIONAMIENTO ESCOLAR

– Conductas perturbadoras en el aula

– Necesidad frecuente de tutoría y refuerzo escolar

– Expulsiones de clase frecuentes

– Repeticiones de curso

– Estrategias deficientes para responder en los exámenes

FUNCIONAMIENTO SOCIAL

– Déficits en la comprensión y la atribución social

– Dificultades en la solución de problemas de tipo social

– Bajos niveles de conductas pro­sociales, cooperación y participación

– Elevada frecuencia de conductas sociales problemáticas: impulsividad, intromisión, agresión y hostilidad

– Dificultades de afiliación: rechazo y aislamiento social

– Dificultades en la relación con los padres, hermanos y con la familia extensa

– Menor estabilidad en las relaciones amorosas (adultos con TDAH: mayores tasas de separación/divorcio que no TDAH)

 ¿COMO PUEDO AYUDAR A UN NIÑO CON TDAH?

El trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad, es un tipo de trastorno crónico, por tanto estará presente siempre, aún así existen diferentes acciones para mejorar y controlar el curso del trastorno.

El tratamiento del TDAH en niños y adolescentes tiene como objetivo mejorar los síntomas y reducir la aparición de otros trastornos asociados.

En niños y adolescentes con TDAH con repercusión moderada o grave en su vida diaria, se recomienda el tratamiento combinado, que incluye tratamiento psicológico conductual, farmacológico e intervención psicopedagógica.

Tratamiento psicológico para el TDAH en niños y adolescentes

La terapia cognitivo conductual (TCC) se ha mostrado científicamente positiva para el tratamiento del TDAH. Consiste en un tipo de terapia que combina la terapia de conducta ( consiste en identificar los factores que están manteniendo la conducta inadecuada y aplicar una serie de técnicas para la modificación y/o eliminación de éstos, combinando la aplicación de técnicas para el incremento de conductas positivas o adecuadas), conjuntamente se realiza un trabajo con los padres a quienes se proporciona un entrenamiento en técnicas para modificar conductas, así como estrategias de trato y comunicación con sus hijos y pautas básicas de actuación, por otro lado se trabaja la parte más cognitiva ( terapia cognitiva, que consiste en un entrenamiento en técnicas de autocontrol, autoinstrucciones y solución de problemas), y por último intervención en la parte más social, proporcionando un entrenamiento en habilidades sociales.

Tratamiento psicopedagógico para el TDAH en niños y adolescentes

La intervención psicopedagógica es imprescindible para el tratamiento combinado del TDAH, pues comprenderá desde las intervenciones encaminadas a mejorar el rendimiento académico del niño o adolescente (mediante reeducación psicopedagógica) hasta aquellas dirigidas a la mejora del entorno escolar y, por lo tanto, de su adaptación a éste, mediante el contacto y las pautas recomendadas para los docentes que estén en contacto con el niño/a.

La reeducación psicopedagógica consiste en un refuerzo individualizado o en pequeños grupos que se lleva a cabo después del horario escolar por parte de un psicólogo o psicopedagogo especializado en el tratamiento de este tipo de trastornos y cuyo objetivo principal es minimizar al máximo los problemas de aprendizaje o competencia académica del niño, mediante un trabajo minucioso de las diferentes áreas o capacidades afectadas por este tipo de trastorno.

La reeducación psicopedagógica incluye acciones encaminadas a:
– Trabajar los hábitos que fomentan conductas apropiadas para el aprendizaje.
– Elaborar y enseñar estrategias para la preparación y elaboración de exámenes.
– Estimulación cognitiva, especialmente encaminada a la estimulación de la atención, la concentración y la memoria.